viernes, agosto 24, 2012
FERNANDO PAULSEN. PREMIO A LA TRAYECTORIA PERIODISTICA. CHILE 2012.
Y aquí estamos. Pertenezco al 1% que lo ha tenido todo y vocifero por el 99% que debiera tenerlo. Porque ya es hora, porque nos mata el corto plazo y sus metas canallas. Porque se necesita respirar ahora y mañana y pasado mañana también. Comer ahora y el próximo año también. Miro a mis hijos y me asusto. No leen los libros que me gustaría que leyeran: ellos chatean, mandan emails, viven en Facebook. Pero saben más que yo de cosas que yo creí que sabía. Y cuando todo cambia y el mundo se transforma en una batalla entre quienes llegaron antes, buscando que nadie más les amague su posición, y las multitudes que persiguen no sólo oportunidades sino también condiciones equivalentes para competir y colaborar, me pongo menos objetivo que nunca y pido abiertamente: No me sigan en Twitter si quieren que avale sus artificiales infladas de acciones. No me vean en Tolerancia Cero si esperan que justifique represiones injustificables. No me lean mis posteos si buscan que asocie delitos con inteligencia y rapacidad con naturaleza humana. No esperen que los aplauda si van a usar la plata de todos como botín del partido. No me consideren aliado si creen que por compartir el mismo deporte compartimos también las mismas ideas.
Esta es mi trayectoria, llena de mierda y maravilla. Y agradezco profundamente a Embotelladora Andina por darme la excusa para agradecer a tantos que me han abierto puertas y me han acompañado hasta aquí
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miércoles, agosto 15, 2012
Un buen día fatal
Iba todo bien, pese a la improvisación del
coordinador de nuestro equipo de trabajo, habíamos salido más o menos bien
parados de nuestra exposición sobre trabajo en red, el día comenzaba bien, el
breake con te y pan con palta vino de perillas en una jornada fría y con visos
de lluvia. El almuerzo en la oficina fue la rutina de siempre con una compañera
mascullando asuntos de pega, nada entretenido. Mas tarde, a eso de las 15.30 estábamos,
mi compañera y yo, frente al grupo de profesores de la escuela en la que haría
una presentación sobre los últimos programas de prevención del consumo de
drogas, para estudiantes. Al parecer les resultó interesante escuchar sobre los
riesgos del consumo en adolescentes y la organización curricular para trabajar
la temática en el aula.
La tarde se fue rápidamente, a la salida
subir a un bus de acercamiento y de ahí al metro de vuelta a Villa Alemana,
corriendo a la reunión del equipo de campaña a nuestro candidato alcalde
revisando estrategias, salidas, actividades, problemas y posibilidades.
L a distracción del trabajo y la actividad
política hacen que me olvide de las deudas, del frío sin calefacción en este
invierno, de la tensión focalizada en la espalda que se desplaza hacia la
cabeza y molesta el sueño, de las deudas, de las malditas deudas, que activan
los fluidos gástricos que catalizan las ulceras que vuelven a avisar de su
presencia con ese dolorcillo punzante.
La vuelta a casa en vísperas de festivo promete,
a lo menso, una cerveza compartida para relajar el trajín y las preocupaciones
sin embargo la desgracia logra aterrizarme en la dura y penca realidad de estos
años negros, el derrame del vaso de cerveza sobre el notebook de mi esposa me
despierta de este día que, con todos sus bemoles, prometía terminar como un
buen día y que finalizó como la boca de un túnel en el que no se ve la luz de
salida.
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