miércoles, noviembre 28, 2007

El SENTIDO DE LOS REGALOS

Esta curiosa historia sugiere que al ofrecer nuestra amistad a alguien que no conocemos, fortalecemos nuestro vínculo fraterno con toda la humanidad. Una vez buscando los pequeños objetos y los minúsculos seres de mi mundo en el fondo de mi casa en Temuco, encontré un agujero en una tabla del cercado. Miré a través del hueco y vi un terreno igual al de mi casa, baldío y silvestre. Me retiré unos pasos, porque vagamente supe que iba a pasar algo.
De pronto apareció una mano. Era la mano pequeñita de un niño de mi misma edad. Cuando acudí no estaba la mano porque en lugar de ella había una maravillosa oveja blanca. Era una oveja de lana desteñida. Las ruedas se habían escapado. Todo esto lo hacía más verdadera. Nunca había visto yo una oveja tan linda. Miré por el agujero, pero el niño había desaparecido. Fui a mi casa y volví con un tesoro que le dejé en el mismo sitio: una piña de pino, entreabierta, olorosa y balsámica, que yo adoraba. La dejé en el mismo sitio y me fui con la oveja. Nunca más vi la mano ni el niño.
Nunca tampoco he vuelto a ver una ovejita como aquélla. La perdí en un incendio. Y aún ahora en este 1954, muy cerca de los cincuenta años, cuando paso por una juguetería, miro aún furtivamente a las ventanas. Pero es inútil. Nunca más se hizo una oveja como aquélla. Yo he sido un hombre afortunado. Conocer la fraternidad de nuestros hermanos es una maravillosa acción de la vida. Conocer el amor de los que amamos es el fuego que alimenta la vida. Pero sentir el cariño de los que no conocemos, de los desconocidos que están velando nuestro sueño y nuestra soledad, nuestros peligros o nuestros desfallecimientos, es una sensación aún más grande y más bella porque extiende nuestro ser y abarca todas las vidas. Aquella ofrenda traía por primera vez a mi vida un tesoro que me acompañó más tarde: la solidaridad humana. La vida iba a ponerla en mi camino más tarde, destacándola contra la adversidad y la persecución.
No sorprenderá entonces que yo haya tratado de pagar con algo balsámico, oloroso y terrestre la fraternidad humana. Así como dejé allí aquella piña de pino, he dejado en la puerta de muchos desconocidos, de muchos prisioneros, de muchos solitarios, de muchos perseguidos, mis palabras. Esta es la gran lección que recogí en el patio de una casa solitaria, en mi infancia. Tal vez sólo fue un juego de dos niños que no se conocen y que quisieron comunicarse los dones de la vida. Pero este pequeño intercambio misterioso se quedó tal vez depositado como un sedimento indestructible en mi corazón, encendiendo mi poesía.
Pablo Neruda, Isla Negra, 1954

viernes, noviembre 23, 2007

Calentamiento Global Discurso de Evo Morales en la ONU

A los grandes medios de comunicación les pasó desapercibido el impresionante discurso que el presidente de Bolivia, Evo Morales, pronunció el pasado octubre en las Naciones Unidas. Habló menos como jefe de Estado y más como un líder indígena cuya visión de la Tierra y de los problemas ambientales está en clara confrontación con el sistema mundial imperante. Denuncia sin rodeos: «la enfermedad de la Tierra se llama modelo de desarrollo capitalista», que permite la perversidad de que «tres familias posean ingresos superiores al PIB de los 48 países más pobres», y que hace que «Estados Unidos y Europa consuman en promedio 8,4 veces más que la media mundial». E hizo esta sabia reflexión de graves consecuencias: «ante esta situación, nosotros, los pueblos indígenas y los habitantes humildes y honestos de este Planeta, creemos que ha llegado la hora de hacer un alto para reencontrarnos con nuestras raíces, con el respeto a la Madre Tierra; con la Pachamama, como la llamamos en los Andes».
La alarma ecológica provocada por el calentamiento global ya iniciado debe producir este primer efecto: que hagamos una parada para repensar el camino hasta ahora andado y para crear nuevos modelos que nos permitan continuar juntos y vivos en este pequeño planeta. Tenemos que reencontrar nuestras raíces terrenales. Urge que reconquistemos la conciencia de que hombre viene de humus (tierra fecunda) y que Adán viene de Adamah (tierra fértil). Somos Tierra que siente, piensa, ama y venera. Y ahora, debido a un trayecto civilizatorio de alto riesgo, montado sobre la explotación ilimitada de todos los recursos de la Tierra y de la voluntad desenfrenada de dominación sobre la naturaleza y sobre los otros, hemos llegado a un punto crítico en el que la supervivencia humana corre peligro.
No podemos continuar tal como vamos o iremos al encuentro de nuestra propia destrucción. Todavía recientemente Gorbachev observaba: «necesitamos un nuevo modelo civilizatorio porque el actual llegó a su fin y agotó sus posibilidades; tenemos que llegar a un consenso sobre nuevos valores o en 30 ó 40 años puede que la Tierra exista sin nosotros». ¿Conseguiremos un consenso mínimo cuando sabemos que el capitalismo y la ecología obedecen a dos lógicas contrarias? El primero se preocupa de cómo ganar más dominando la naturaleza y buscando el beneficio económico, y la ecología de cómo producir y vivir en armonía con la naturaleza y con todos los seres. Hay aquí una incompatibilidad de base. O el capitalismo se niega a sí mismo y crea así espacio para el modo sostenible de vivir o nos llevará fatalmente al destino de los dinosaurios.
Pero confiamos, como Evo Morales, que en su discurso enfatizó: «tengo total confianza en el ser humano, en su capacidad de razonar, de aprender con sus errores, de recuperar sus raíces y de cambiar para forjar un mundo justo, diverso, inclusivo, equilibrado y armónico con la naturaleza».
Nos consuela la sentencia del poeta alemán Hölderin: «Cuando es grande el peligro, grande es también la salvación». Cuando, dentro de unos años, alcancemos el corazón de la crisis y todo esté en juego, entonces valdrá la sabiduría ancestral y del cristianismo de los orígenes: «en caso de extrema necesidad, todo se vuelve común». Capitales, saberes y haberes serán participados por todos para poder salvar a todos. Y nos salvaremos, con la Tierra.


Leonardo Boff

martes, noviembre 20, 2007

Clasismo extremo.

Hoy en el peródico La Tercera leo un titular que dice "Vecinos rechazan casa de pescadores en exclusivo sector de Concón" y en el sitio http://www.cooperativa.cl/ uno de similar significado. Los artículos que acompañan a estos encabezados no necesitan explicación y dan cuenta del pavor que les provoca, a vecinos acomodados, la posibilidad de vivir junto a familias de pescadores, exponiendo, de esta manera, la discriminación exacerbada que practican sectores de nuestra sociedad que, además de concentrar los beneficios de este modelo de sociedad, se sienten dueños exclusivos de los mejores paisajes y de las buenas formas de vivir. Curiosamente para estos finos vecinos los terrenos, donde se construirán las casas de los pescadores de Caleta Higuerillas, fueron donados hace más de 100 años por José Borgoño Maroto uno de los fundadores de Concón, con la cláusula que debían destinarse a los pescadores artesanales de la zona. Reproduzco, a continuación parte del texto de cooperativa.cl, que , personalmente me provoca indignación:
"Las 27 familias de pescadores de la caleta Higuerillas podrán habitar sus nuevas casas en junio de 2008, lo que, a juicio de la administración del edificio Travesía, perjudica "enormemente" a la plusvalía de los departamentos.
En el exclusivo sector de Higuerillas en Concón, a un lado del lujoso condominio Travesía, se construyen 27 viviendas sociales para los pescadores de la caleta, ubicadas a unos metros del lugar, obra que ha causado un gran malestar a los propietarios del edificio.

Dentro de siete meses, los trabajadores serán vecinos del club de yates de la comuna y del condominio, que agrupa departamentos de entre 80 y 150 millones de pesos.

A juicio de la administradora del edificio, Gabriela Salsilli, la construcción los "perjudicará enormemente".

"Podrían haber hecho un colegio para los niños de los pescadores, una sede social, pero no una población de 27 casas, qué gente como ellos van a vivir en una casa de 90 metros cuadrados... imposible. Entonces las van a empezar a ranchar, a criar pollos, a traer perros", comentó una airada Salsilli.

Por su parte, la vocera de las familias beneficiadas, Alicia Vera, señaló que ocuparán un terreno que les ha pertenecido desde hace un siglo, con la donación que realizó para los pescadores José Borgoño Maroto, uno de los fundadores de Concón.

"No por ser personas de escasos recursos se va a perder la plusvalía, porque nosotros ya estábamos antes de que se construyeran todos esos enormes edificios", explicó la dirigente."

domingo, noviembre 18, 2007

En Latinoamérica también somos xenófobos

Reproduzco parte de un artículo del períodico Mundo Hispano que reproduce opiniones de nuestro artículo "Xenofobia en Chile"

"Durante las años de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), en Chile se fomentó una campaña estatal de desprestigio contra la cultura chileno-latinoamericana y se exacerbó las bondades del "american of way". Se relacionó lo latinoamericano con "lo subdesarrollado, lo mafioso, lo folklórico", resume un estudio titulado Xenofobia en Chile. Nación, aislamiento o ignorancia, a cargo de Miguel Tapia. Es la razón de la recepción hostil a bolivianos, peruanos y ecuatorianos ("in-dio-culeaos").
"Somos insulares, soberbios, arrogantes, incapaces de mirar la multiculturalidad y sus posibilidades para el desarrollo de esta aldea global", expresa de manera autocrítica el historiador Carlos Cortés Segovia. A su vez, los ciudadanos de Chile que han emigrado a la Argentina y viceversa suelen ser discriminados."

miércoles, noviembre 14, 2007

¿NUEVA REFORMA EN LA EDUCACIÓN?

Se acaba de firmar, ayer, un acuerdo político para cambiar la Ley Orgánica Constitucional de Educación en Chile. Los presidentes de los partidos y la Presidenta han tenido presente las conclusiones de la comisión creada despues de las movilizaciones de estudiantes secundarios el 2006, sin embargo ellas han sido puestas a la mesa de negociación de los partidos y allí la discusión se ha dado vuelta en el fin del lucro en la educación subvencionada, en que esto es un triunfo de la idea del desalojo que plantea el, ahora ultraderecista, senador Allamand o que aquí deben seguirse las conclusiones del Congreso ideológico de la Democracia Cristiana. Cada cual utiliza el tema de la Educación para sacar partido para los intereses de algun grupo partidista o de interes económico y los verdaderos temas puestos por los estudiantes secundarios y que son preocupación de las familias que ven en la educación una posibilidad de movilidad social para sus hijos, quedan de lado.
Los acuerdos no dicen nada sobre el problema de la calidad de los aprendizajes que los sectores más pobres de este país logran y que, año a año, los relegan a competir con desventajas enormes para ingresar a la educación superior y de la misma forma para acceder a trabajos dignos. Los acuerdos no dicen nada sobre lo que sucede al interior de las aulas ni sobre un sistema de evaluación que provoca situaciones artificiales de prácticas pedagógicas mientras este dura. Los acuerdos no dicen nada sobre la formación de pregrado de los docentes ni de incentivos para promover un trabajo que produzca aprendizajes significativos y pertinentes a la sociedad del conocimiento.
Los políticos, muchos de ellos ignorantes, entre otras cosas, de lo que significa la educación para el desarrollo, no son los únicos ausentes de este debate, lamentablemente el Colegio de Profesores no entra en dialogos con la ciudadanía para provocar una discusión que plantee un Proyecto Educativo que asegure la equidad en el acceso al conocimiento, la pertinencia cultural de los planes y programas y la participación de la comunidad, partiendo por la familia, en la definición de políticas educacionales autónomas.

jueves, noviembre 08, 2007

Julio Martínez se Encuentra Grave.


Como el título, así rezan las noticias de hoy. Personalmente, me ha emocionado esta noticia. Fuí un seguidor de su carrera, en el antiguo diario Las Últimas Noticias expresión del periodismo de la vieja guardia, ese que se amalgamaba con la literatura, el teatro, la poesía, la historia y la cultura, donde cualquier día de la semana era posible encontrarse con Luis Sanchéz Latorre, que acaba de partir, con Daniel de la Vega, con Andrés Sabella, con renato González Mister Huifa y, por supuesto con Jota Eme. En esas páginas don Julio, no solo comentaba el deporte, departía con el lector sobre sus andanzas por la bohemia santiaguina y sus coloridos dialogos con personajes de la cultura de aquel entonces. Recuerdo su voz en la radio con intervenciones del mismo tenor y más tarde en televisión, donde en la semana y en especial cada domingo, don Julio nos regalaba una reflexión sobre la vida, un recuerdo de deportistas o personajes de nuestra historia reciente, destacando, siempre, las virtudes de aquellos a quienes se refería y no faltaba la referencia a la letra de algun tango, expresión musical a la que era aficionado. Un recuerdo especial me ha venido a la memoria y es la ocasión en que durante la dictadura sus colegas del Colegio de Periodistas le rindieron un homenaje, su discurso de agradecimiento fue una maciza intervención sobre su profesión, sobre la democracia y la libertad de expresión.

Tengo pena por este gran hombre que se nos va pero, a la vez, una sana envidia de verlo llegar al final de sus días pudiendo mirar hacia atrás dejando una marca dificil de superar en amistad, en humanidad, en amor por su país y su gente, retribuido por el afecto, que tantos, a la distancia le profesamos. Gracias Don Julio.

martes, noviembre 06, 2007

FELICIDAD INTERNA BRUTA

Comparto este hermoso artículo de Leonardo Boff
Bután es un pequeñísimo reino hereditario en las faldas del Himalaya, entre China, la India y el Tibet. Sólo tiene dos millones de habitantes, y su ciudad mayor es la capital, Timfú, con cerca de cincuenta mil habitantes. Está amenazado de desaparecer dentro de pocos años, en caso de que los lagos del Himalaya, que están creciendo por el deshielo, se desborden avasalladoramente. Gobernado por un rey y por un monje que tiene casi la autoridad real, es considerado uno de los menores y menos desarrollados países del mundo. Con todo, es una sociedad sumamente integrada, patriarcal y matriarcal simultáneamente, dado que el miembro más influyente se transforma en jefe de familia.
Bután posee algo único en el mundo y que todos los países deberían imitar: el «índice de felicidad interna bruta”. Para el rey y el monje gobernantes, lo que cuenta en primer lugar no es el PIB, Producto Interno Bruto, medido a base de todas las riquezas materiales y servicios que un país ostenta, sino la Felicidad Interna Bruta, resultado de las políticas públicas, del buen gobierno, de la equitativa distribución de la renta que resulta de los excedentes de la agricultura de subsistencia, de la ganadería, de la extracción vegetal, de la venta de energía a India, de la ausencia de corrupción, de la garantía general de educación y salud de calidad, con carreteras transitables en los valles fértiles y en las altas montañas, pero especialmente como fruto de las relaciones sociales de cooperación y de paz entre todos. Eso no ha llegado a impedir conflictos con Nepal, pero tampoco ha desviado el propósito humanístico del reino. La economía, que en el mundo globalizado es el becerro de oro, comparece sólo como uno de los items en el conjunto de los factores a ser considerados.
Por detrás de este proyecto político funciona una imagen multidimensional del ser humano. Concibe al ser humano como un nudo de relaciones orientado en todas las direcciones, que tiene sí hambre de pan, como todos los seres vivos, pero que principalmente se mueve por el hambre de comunicación, de convivencia y de paz, que no pueden ser compradas en el mercado o en la bolsa. Función de un gobierno es atender a la vida de la población en la multiplicidad de sus dimensiones. Su fruto es la paz. En la inigualable comprensión que la Carta de la Tierra elaboró sobre la Paz, ésta «es la plenitud que resulta de las relaciones correctas consigo mismo, con otras personas, con otras culturas, con otras vidas, con la Tierra y con el Todo mayor del cual somos parte (IV, f).
La felicidad y la paz no son construidas por las riquezas materiales y por las parafernalias que nuestra civilización materialista y pobre nos presenta. En el ser humano ella ve sólo un productor y un consumidor. Lo demás no le interesa. Por eso, tenemos tantos ricos desesperados, jóvenes de familias sin problemas económicos que se suicidan por no encontrar ya sentido en la abundancia. La ley del sistema dominante es: quien no tiene, quiere tener; quien tiene, quiere tener más; y a quien tiene más no le parece suficiente. Olvidamos que lo que nos trae la felicidad es el relacionamiento humano, la amistad, el amor, la generosidad, la compasión, el respeto... realidades que valen pero que no tienen precio. Lo dramático está en que esta civilización humanamente pobre está acabando con el Planeta con el afán de ganar más, cuando lo importante sería tratar de vivir en armonía con la naturaleza y con los demás seres vivos.
Bután nos da un bello ejemplo de esta posibilidad. Sabia ha sido la observación de un pobre de nuestras comunidades, que ha comentado: «Aquella persona es tan pobre tan pobre, que sólo tiene dinero». Y, realmente, era muy infeliz.

domingo, noviembre 04, 2007

HALLOWEEN EN CHILE

Recuerdo que siendo estudiante de Enseñanza Media, visitaba a mi abuela materna que al igual que yo y mi familia viviamos en Quilpué, su casa quedaba al final de la calle Camilo Henríquez y en el recorrido, que hacía caminando por esa arteria, pasaba por algunas residencias de familas de origen alemán y me me parecía llamativo que en semana santa, el domingo de Pascua, en sus jardines habían figuras de conejos y huevos multicolores. El motivo de mi atención tenía su explicación en una costumbre de la cultura de algunos paises europeos que estas familias preservaban en sus hogares en Chile. El tiempo y el comercio introdujeron y masificaron la práctica de regalar huevos de pascua, imponiéndose una nueva forma de colonialismo cultural que, más allá de la globalización, incorpora conductas sociales solo con el afan mercantil de vender un sinnúmero de productos asociados a ellas.
Tanto o más patetico que la fiesta del conejo es la celebración de Halloween en Chile, esta práctica conocida a través del cine de los Estados Unidos, se ha incorporado a nuestra cultura de país aspiracional que, a las "puertas del desarrollo", como nuevo rico, quiere remedar las actitudes y las praxis de los opulentos. Los días que anteceden al 1 de noviembre, el comercio se desborda de artilugios necesarios para salir por las calles en rídicula farándula o asistir a eventos halloween, este año en una actitud que considero nefasta, los Obispos de la Iglesia Católica han llamado a ver el lado bueno de este caballo de troya del consumismo.
Nos seguiremos tragando la cultura y la religión del imperio, así como ya lo hicimos con la imagen del viejo pascuero introducido en nuestro imaginario por la Coca Cola o el día de los enamorados o de San Valentín que se comienza a celebrar en Chile durante la dictadura.